¿Sabes cómo cuidar de tu jardín en verano? Te damos todas las claves

 Llega el verano y lo único que te apetece es sacar un par de sillas al jardín y sentarte a disfrutar del frescor del atardecer y el aroma que despliegan tus plantas

Pero ¡cuidado! 

Que tú estés de vacaciones no significa que tu jardín tambíen lo esté.

Porque igual que nosotros, las plantas también pueden sufrir bastante por el exceso de luz y calor. 

Si quieres que tu jardín se mantenga en perfecto estado toda la temporada, tienes que darle algunos cuidados concretos.

¿Quieres saber cuáles?

Entonces sigue leyendo, que te los explicamos.

 

Las 6 tareas de mantenimiento básicas para cuidar del jardín en verano (+1 consejo extra)

Cada jardín es único y requiere sus propios cuidados.

No es lo mismo uno mediterráneo o de secano, un jardín con césped o con rocallas… Pero sí que hay ciertas tareas de mantenimiento que, a grandes rasgos, se pueden aplicar a todos ellos.

Vamos a verlas

 

1. Riega lo suficiente (pero no en las horas de más calor)

Habrás oído mil veces este consejo.

Pero ¿sabías que el ahorro de agua no es el único motivo por el que debes regar por la mañana o por la noche?

Además de eso, si riegas en las horas de más calor podrías dañar tus plantas.

El motivo es que las gotitas del riego actúan como diminutas lupas que concentran los rayos del sol y acaban quemando las hojas.

Si regar a estas horas te resulta difícil o imposible (porque estás fuera de vacaciones, por ejemplo), lo mejor es que instales un sistema de riego automático.

 

2. Retira las flores marchitas (para disfrutar del resto)

Una de las cosas que más nos encanta del verano es tener un jardín colorido y lleno de flores.

Pero claro, a medida que nacen nuevas flores, las antiguas se van marchitando.

Y esas flores marchitas le roban energía a la planta. No solo eso, sino que también “ocupan espacio” y no dejan que germinen nuevos capullos.

Por eso es importante que las vayas podando para alargar todo lo posible el periodo de floración y tener unas plantas bien vistosas todo el verano.

En esto entra en juego un aspecto fundamental: el abono.

3. Un poco de abono siempre se agradece

Ya sabes que una planta emplea mucha energía en desarrollar sus flores. 

Y uno de los motivos por los que algunas no florecen es porque les faltan nutrientes; es decir, que no las hemos abonado suficiente o de manera adecuada.

Durante el verano es importante que las abones de manera regular, siempre en función de las necesidades específicas de cada planta.

Además, recuerda que existen abonos específicos para plantas con flores, que son ricos en fósforo y potasio (los nutrientes que más necesitan las plantas para florecer).

En lo que respecta al césped, al final del verano puede ser un buen momento para recebar y abonar, con el fin de prepararlo de cara al invierno.

4. Haz podas de limpieza

La poda es una tarea fundamental en verano para que nuestras plantas se mantengan sanas.

Entre mediados de julio y principios de septiembre es bueno realizar una poda de limpieza para eliminar los tallos y hojas muertas que interfieran en el desarrollo de la planta.

En concreto, la época estival es el momento perfecto para prestarle atención a tus:

>> Trepadoras: las trepadoras tienden a crecer de forma descontrolada durante esta época. Con una buena poda ordenaremos el follaje y permitiremos que la luz llegue de manera uniforme a todas las hojas.

>> Arbustos: aprovecha el verano para devolverles su forma a los arbustos que hayan crecido demasiado durante el invierno y la primavera.

>> Palmera: también es bastante común limpiar las palmeras durante esta época. Pero dado lo difícil que puede resultar acceder a las más altas, este trabajo suele dejarse en manos de jardineros expertos, que cuentan con el equipamiento de seguridad correspondiente (si lo necesitas, en Viveros González disponemos de un servicio de limpieza de palmeras).

5. Si tienes césped, córtalo

Si tienes césped, córtalo

Es importante cortar el césped durante el verano, y aquí te explicamos por qué: Cortar el césped a una altura adecuada reduce el estrés de las plantas, permitiéndoles manejar mejor las altas temperaturas y la sequía. Además, fomenta el crecimiento de brotes nuevos y más fuertes, contribuyendo a un césped más denso y saludable.

Un césped bien mantenido tiene menos probabilidades de desarrollar enfermedades y plagas, ya que la eliminación regular de las puntas de las hojas reduce la acumulación de esporas de hongos y otros patógenos.

Cortar el césped a una altura recomendada (generalmente más alta en verano) ayuda a conservar la humedad en el suelo, protegiéndolo del sol directo y reduciendo la evaporación del agua, lo que mantiene las raíces frescas.

Además, un césped bien cortado siempre se ve mejor, dando una apariencia limpia y cuidada que puede aumentar el atractivo de tu hogar. Por estas razones, es mejor cortar el césped durante el verano, asegurándote de hacerlo a una altura adecuada y de manera regular para mantenerlo saludable y resistente durante toda la temporada.

6. Mucho cuidado con los visitantes indeseados (hongos y plagas)

A los insectos y hongos también les encanta el calorcito. 

Y si te descuidas, podrías encontrarte con que tus plantas han sido invadidas por pulgones, cochinillas, araña roja o algún hongo como el ofidio.

Como ya sabes esto es bastante peligroso, porque en el peor de los casos podrían provocar la muerte de la planta.

Por eso es importante que:

  • Evites regar más de la cuenta: un exceso de riego puede hacer que las raíces se pudran y favorecer la aparición de hongos. Además, si riegas de forma más espaciada lograrás que tus plantas se hagan más resistentes a la sequía (siempre según las características de cada especie) y te demanden menos agua.
  • Apliques los fitosanitarios correspondientes: si ves que tu planta muestra signos de enfermedad o detectas alguna plaga, asegúrate de aplicar cuanto antes un insecticida o un fungicida para eliminarla.

Revisar tus plantas de vez en cuando y estar alerta puede ahorrarte más de un disgusto.

7. Comprueba el riego automático

Ahora que nuestro riego automático va a estar funcionando más a menudo, es importante que lo revisemos para asegurarnos de que funciona bien. Comprueba que el programador se activa cuando debe, que las boquillas no presentan obstrucciones y que no hay encharcamientos ni pérdidas de agua.

Extra: Elige bien las plantas que siembras en el jardín

Esto lo podemos entender de dos maneras.

Por un lado, como es lógico, el verano no es igual en todas partes. Y eso influye en la selección de especies que siembras en tu jardín.

Así, por ejemplo, en los jardines mediterráneos es habitual tener plantas como la gitanilla, la sunpatines o la margarita, que son amantes del sol. Incluso se están popularizando los jardines de bajo mantenimiento (jardines de rocallas, con crasas y suculentas, etc.).

En cambio, especies más habituadas a climas templados tendrían problemas para sobrevivir en el exterior durante esta época.

Por otro lado, hay ciertas especies que no solo aguantan bien el calor, sino que además son perfectas compañeras para las noches veraniegas. 

Como ejemplo tienes el azahar o la dama de noche.

Si siembras estas plantas en tu jardín, los aromas que te regalarán al caer la tarde serán una auténtica delicia.

Si no tienes claro cuáles elegir, aquí te dejamos algunas ideas...

 

Cuida tu jardín este verano… pero también disfrútalo

Porque con tanto trabajar, se nos olvida lo importante: que al final, el principal motivo por el que cuidamos nuestras plantas es porque nos hacen felices. 

No importa si te gusta adornar tu jardín con luces, si eres de los que adora hacer barbacoas o si simplemente te gusta sentarte en la terraza a disfrutar de la brisa nocturna. Cualquier opción es buena para disfrutar del regalo que son nuestras plantas.

Y si tienes dudas sobre cómo cuidarlo, o necesitas a alguien que te asesore para decorarlo y darle un toque especial, nos tienes a nosotros.

Solo tienes que ponerte en contacto con nosotros haciendo clic aquí y contarnos qué necesitas.

Lo de cuidar tu jardín es nuestra especialidad.