Cómo cultivar albahaca en casa (¡tus comidas nunca volverán a saber igual!)

Posted By: Manuel Gaviño In: Cuidado de plantas Comment: 0 Hit: 690

Quieres saber cómo cultivar albahaca en casa? Descúbrelo con esta guía paso a paso.

La albahaca es la compañera perfecta de muchísimos platos.

Una planta culinaria muy apreciada por el agradable aroma que desprende y, sobre todo, por su riquísimo sabor.

Solo tiene un problema…

Y es que su sabor se pierde rapidísimo desde el momento en que cortas las hojas.

Por eso, si tienes la posibilidad de usar las hojas frescas y recién cogidas, el sabor de tus platos mejorará muchísimo.

Lo mejor es que eso es algo que está alcance de cualquiera, porque cultivar esta planta es muy sencillo.

¿Quieres saber cómo?

Pues sigue leyendo, porque aquí te contamos:

  • Cuándo sembrar tu planta de albahaca.
  • Los cuidados que necesita.
  • Cómo saber cuándo está lista para coger las hojas (y cómo hacerlo sin dañar la planta).

Vamos allá.

Cómo cultivar la albahaca: guía paso a paso

El proceso no puede ser más sencillo.

Lo único que necesitas es un buen semillero y una maceta para trasplantarla una vez haya germinado y crecido suficiente.

Pero no nos adelantamos y te lo explicamos por partes.

A. Cuándo sembrar tu planta de albahaca

La manera más común de cultivar la albahaca es a través de semillas.

Estas las puedes conseguir de un ejemplar adulto durante el otoño, una vez terminada la floración. Solo tienes que envolverlas en papel y mantenerlas en un lugar fresco y seco. 

Otra opción es comprarlas en tu vivero de confianza.

Tienes que sembrarlas a poca profundidad y cubrirlas con una capa de material orgánico. Luego, pon el semillero en un lugar sombreado y donde haya una humedad constante (te será más fácil si lo tienes dentro de casa).

La albahaca no soporta el frío, así que es conveniente que la siembres entre febrero y marzo (o un poco más tarde, si vives en una zona fría).

Las semillas suelen tardar entre 10 y 15 días en germinar. 

En ese momento deberás trasladar colocar el semillero en un lugar muy soleado y empezar a regar con regularidad.

Cuando la plántula alcance los 8-10 centímetros de altura, será el momento de trasplantarla a una maceta.

B. Cuidados de la albahaca

Como ves el proceso para sembrarlas es bastante sencillo. Y los cuidados de la propia planta son bastante similares.

Ahora bien, hay algunos trucos que debes tener en cuenta para que tu planta crezca sana (y desarrolle unas hojas con mucho sabor).

1. Riego

La albahaca adora el agua.

Desde el momento en que surgen los primeros brotes es importante que la riegues de manera frecuente, incluso a diario.

Asegúrate de que el sustrato se humedece por completo, pero ¡ojo con encharcar! 

Una acumulación de agua en las raíces podría ser perjudicial para tu planta.

2. Temperatura

Esta aromática es originaria de zonas cálidas, así que el frío es su peor enemigo.

Si la mantienes dentro de casa (nosotros, por ejemplo, solemos tener una macetita en la cocina para coger las hojas directamente) no habrá problema, pero si quieres cultivarla en exterior es fundamental que no esté expuesta a heladas.

3. Sustrato

La albahaca es poco exigente con el suelo.

Lo más importante es que el sustrato tenga un buen drenaje, para evitar encharcamientos. Puedes usar materiales porosos que absorban la humedad pero no se encharquen.

Puedes darle abono orgánico para favorecer el crecimiento, pero no en gran cantidad.

4. Luz

Para esta planta, la luz es fundamental.

Le gusta recibir sol directo, y si puede ser durante varias horas al día. Por eso, lo mejor es que tengas la maceta cerca de una ventana donde entre mucha luz todo el día.

5. Plagas

Si la cultivas dentro de casa es difícil que le ataquen las plagas. Sin embargo, el riesgo siempre existe.

El principal enemigo de la albahaca es la mosca blanca, cuyas larvas se alimentan de las hojas de la planta. Además, la propia mosca absorbe la savia del tallo, debilitándola.

Respecto a hongos, esta aromática puede sufrir el ataque de algunos enemigos conocidos como la fitóftora.

En exterior también es uno de los platos favoritos de los caracoles.

En todos estos casos lo mejor es utilizar el fitosanitario correspondiente.

C. ¿Cómo sé cuándo está mi albahaca lista para cosechar?

Unos 40 días después del trasplante, la albahaca habrá crecido lo suficiente como para admitir que le “cojamos prestadas” un par de sus hojas.

Lo que haremos será cortar los extremos de los tallos antes de la floración. 

Ten cuidado de realizar el corte siempre por encima de la yema. Si no, esto podría afectar al sabor de las futuras hojas que desarrolle.

Retira las hojas con cuidado y recuerda echarlas a la comida cuanto antes, porque eso hará que su aroma se conserve.

¿Listo para aderezar tus platos con el sabor de la albahaca?

Ya lo has visto.

La albahaca no solo es una compañía muy agradable (además de deliciosa) mientras cocinamos.

Además, es una planta que se puede cultivar con muchísima facilidad.

Por cierto, si quieres profundizar más en el cultivo de las plantas culinarias, aquí tienes un post donde te explicamos todo lo que necesitas saber.

Y si tienes dudas, ya sabes que puedes consultarnos. Estamos aquí para lo que necesites.

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