Que es un esqueje y cómo se hace: guía paso a paso

Qué es un esqueje y para qué sirve

Un esqueje consiste en extraer un trozo de una planta viva para colocarla en otra planta o en una maceta.

Hay varios motivos para hacer un esqueje, pero a grandes rasgos tenemos:

  • Multiplicar ciertas especies de plantas.
  • Crear especímenes con resistencias específicas a determinadas enfermedades y/o plagas (por ejemplo, es muy habitual combinar un esqueje de sandía con una base o “portaesqueje” de calabaza, porque así se refuerzan las defensas naturales de la sandía).

En cualquier caso, se trata de un proceso de reproducción muy utilizado.

¿Qué tipo de plantas se reproducen mediante esqueje?

Muchas especies (aunque no todas) admiten la reproducción por esqueje. Entre ellas tenemos:

  • Árboles y arbustos: tanto de hoja perenne como caduca.
  • Plantas herbáceas: utilizando una rama sana.
  • Plantas de interior: se emplea sobre todo con las que tienen tallos rígidos, que son más sencillas de manipular.
  1. El proceso paso a paso para realizar un esqueje

Aquí nos vamos a centrar en explicarte cómo hacer un esqueje con maceta. Y es que este es el método más sencillo si nunca has hecho uno antes.

1. Corta una parte de la planta

Empieza por cortar un tallo o una rama recién brotada de la planta que quieras multiplicar.

Asegúrate de que se trata de una rama sana, para que pueda enraizar y desarrollarse de la forma adecuada.

Para plantas pequeñas o incluso arbustos, lo normal es que el esqueje no mida más de 10 centímetros. En el caso de las especies más grandes, puedes cortar un trozo más amplio.

Además, asegúrate de tener unas tijeras bien afiladas y desinfectadas, para hacer un corte limpio y evitar que la herida de la planta se infecte.

2. Limpia el esqueje

Si la rama que has cortado tiene hojas o botones florales, asegúrate de eliminarlos. 

Este tipo de brotes absorben los nutrientes de la planta, y harán que le cueste más enraizar y desarrollarse.

Antes de sembrarla, puedes aplicar también un enraizaste en la base del esqueje. Esta sustancia favorece el crecimiento radicular. 

3. Prepara la maceta que vayas a usar

Llena de sustrato la maceta en la que vayas a sembrar el esqueje. Utiliza una mezcla de tierra y materia orgánica para darle a la nueva planta los nutrientes que necesitará para crecer.

Hay algunas especies que enraízan mejor cuando las sumergimos en agua. Infórmate bien sobre las necesidades de la planta que quieres multiplicar para saber cómo hacerlo de la mejor manera.