Verbena bonariensis rígida - Verbena morada

En Viveros González, el género Verbena ofrece una gama diversa y vibrante de aproximadamente 250 especies herbáceas o semiarbustivas, originarias de diversos continentes. Entre estas, destacan Verbena rigida, Verbena bonariensis, Verbena officinalis, Verbena brasiliensis, Verbena hybrida, Verbena hastata y Verbena corymbosa.

Conocida comúnmente como Verbena rigida, esta especie se origina en el sur de Brasil y el norte de Argentina. Son plantas semiperennes, con ramificaciones rastreras o colgantes, que se extienden mediante estolones y pueden alcanzar hasta medio metro de altura. Sus hojas, de un verde intenso, son lanceoladas y dentadas, con disposición opuesta. Florecen abundantemente en verano y otoño, exhibiendo una profusión de flores púrpuras, rosadas o azules (dependiendo de la variedad) en cabezuelas que cubren la planta por completo.

Estas versátiles plantas encuentran su espacio en bordes, taludes, pequeños muros, rocallas y zonas soleadas pero resguardadas en el jardín. Ideales para cultivo en maceta, se destacan en grupos junto a Crocosmia, Pennisetum alopecuroides, Dahlia y Achillea.

Para su desarrollo óptimo, necesitan pleno sol y climas cálidos, soportando heladas de hasta -10°C. Pierden sus hojas con el frío, rebrotando en primavera. El suelo debe ser bien drenado, con materia orgánica. El trasplante se realiza en primavera cuando las raíces asomen debajo de la maceta.

El riego debe ser moderado, evitando el encharcamiento y priorizando el suelo sobre la planta al regar. El abono con materia orgánica al inicio de la primavera es beneficioso, al igual que una ligera poda post-floración para fomentar nuevos brotes. Sensibles al exceso de humedad, pueden desarrollar enfermedades fúngicas, aunque suelen resistir plagas comunes.

La multiplicación por semillas sembradas en primavera en semilleros, cubiertas ligeramente con tierra y papel oscuro, favorece la germinación en un sustrato húmedo pero no encharcado.